Bruno y Giuseppina Filippone, comenzaron a trabajar hace más de cuatro décadas en el mundo de la restauración. Y desde 1994, se enamoraron de una de las zonas más atractivas del Mediterráneo, Marbella, la capital de la costa del sol. Aquí elaboran pasta italiana a diario, siguiendo los procedimientos tradicionales italianos garantizando su frescura en todos los platos y pizzas y llevan a su mesa la tradicional cocina italiana.
Confeccionan una carta acorde a los alimentos de cada estación con sugerencias semanales atendiendo a los productos típicos de cada temporada.